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Blog Roble


La gran mayoría de nosotros hemos deseado durante nuestra vida un juguete o algún obsequio que nos provoque emoción. Tal vez en la adolescencia era coche ó tal vez en la edad madura sean los bienes inmuebles. Así como cambiamos nuestras ideas a través del tiempo, también nos van surgiendo nuevas oportunidades. Debemos de aprender a reconocer en qué etapa de vida nos encontramos financieramente y tomar acción desde ese punto
La regla universal destinada al ahorro recomienda 50/20/30, es decir que el 50% de lo que ganamos debemos destinarlo para el consumo básico, el 20% para ahorros y el 30% para los gastos personales.
Podemos incentivar el deseo de ahorrar de la siguiente manera:

Ponte una meta a corto plazo y que sea alcanzable

Si no optas por la regla, ahorra de acuerdo a tus posibilidades, lo importante es que empieces con una cantidad mínima y lograr formar el hábito basado en la constancia.

Busca maneras en donde no puedas tocar ese dinero, desde una alcancía, cuenta bancaria, pagaré bancario, CETES directo, caja de ahorro o hasta una tanda.

Analiza tus gastos y busca en que sí puedes recortar. Recuerda que no puedes tocar gastos básicos.

Recorta gastos innecesarios. No podemos quitarlos de tajo pero si podemos disminuirlos y eliminarlos al paso del tiempo

Mantente firme ante las compras compulsivas y evita llevarte por tus impulsos del momento.

El ahorro no sólo es monetario. Puedes tener más dinero al ahorrar recursos en casa (luz, agua, gas etc).

Si te sobra dinero no lo malgastes.